Botines

En el momento en el que las segundas y a veces incluso las terceras rebajas están ya de capa caída y las estanterías de las tiendas empiezan a mostrarnos lo que se llevará en unas semanas comienzan de nuevo, como cada año, a hacer acto de presencia los botines.

Pocas prendas pueden afirmar con tanta certeza ser el perfecto comodín. Un calzado que casa con todos y con todo, y es que no hay estilo que se le resista ni prenda que no acompañe de forma sobresaliente.

Además son el calzado ideal para los momentos de cambio de estación. Esos días en los que llueve, hace algo de frío pero no es tiempo aún de ponerse el abrigo ni las botas de invierno. Por eso vemos con frecuencia como los botines llenan nuestras ciudades durante el otoño o la primavera, pero son igual de útiles en invierno (aquellos fabricados en cuero y con suela gruesa) y también para noches de verano, festivales y para las zonas en las que el sol no pega demasiado fuerte.

No te costará encontrar botines de todos los estilos. Así, tenemos botines moteros o rockeros con hebillas, que mezclan el acabado mate con los brillos. Combínalos con vaqueros rotos o desgastados para cambiar el estilo motero por el grunge.

Con ligeras variaciones en color y estampado, los botines étnicos con flecos y adornos parece que nunca dejarán de estar de moda. Tenemos también los country, como los botines de estilo cowboy o campero que gracias a la variedad de diseños disponibles son perfectos tanto para el verano como para el invierno. Los botines oxford son otros grandes de esta sección, ideales para las working girl (en verano mejor decantarse por su versión zapato).

Hablando de los botines para la época estival, no podemos olvidar los botines tipo sandalia o las sandalias abotinadas. Perfectos para veranos algo frescos y otoños de mucho calor, los encontramos de todos los tipos: con hebillas, cordones, tacón ancho, de aguja o incluso planos.

Por una parte, la caña baja de los botines, al igual que ocurre con la caña alta de las botas altas, recoge el pie aportando estabilidad al tobillo y sujetándolo. Por otra, la suela generalmente gruesa consigue aislar el pie del frío y gracias a ella no sentirás las imperfecciones del terreno.

Normalmente a la suela se le añade una cuña o un tacón alto o bajo que además de ayudarnos a evitar patinazos accidentales conseguirá repartir nuestro peso entre la punta y el talón del botín.

Los botines han estado siempre muy presentes entre nuestro calzado. Desde los zapatos abotinados con tacón de carrete que llevaron muchísimas mujeres en el siglo XVIII, pasando por esos con botones a modo de cierre y adorno. También desfilaron por nuestros pies los conocidos botines Chelsea, los de cordones y los botines con plataforma. Con tanta variedad es difícil elegir y fácil perderse, por eso hemos reunido algunos trucos para que elijas cuándo y con qué llevar tus botines.

En color negro y con muy poco tacón. Sencillez y elegancia atemporal. Al tener poco tacón son cómodos, sofisticados y versátiles.

Junto con las hebillas, los cordones conseguirán adaptar los botines a tu tobillo y a tu pie. Para largas caminatas esto es completamente necesario y para el día a día recomendable .

En verano cambia las sandalias por botines para conseguir un look más vanguardista. Para un look desenfadado combina tus botines con pantalones pitillo por encima del tobillo.

Esta temporada hemos visto tacones no solo anchos sino anchísimos, transparentes, con adornos en su interior e incluso de espejo como estos de satén firmados por Gucci.

Las cuñas te permitirán añadir centímetros a tu estatura sin incomodidades. Son tacones cómodos y muy adecuados para calzado tipo botín, un clásico perfecto para otoño y primavera.

Las suelas y los tacones de madera han sido todo un éxito esta temporada. Los hemos visto en zuecos, en sandalias y por supuesto en botines.