Botas para mujer

La lucha por la igualdad entre hombres y mujeres abarca cualquier área de la vida moderna. Y la moda no es una excepción. Hoy en día el vestuario femenino ha adaptado con gran éxito, prendas que hace tan solo unos años eran exclusivamente para hombres, como los pantalones o los trajes de chaqueta. Lo mismo se puede decir de las botas. En la actualidad nos encontraremos con muchas variantes de este calzado que, en un principio, parecían destinados únicamente al sector masculino pero que ahora son una prenda más de la mujer.

Así, muchos diseñadores de botas para mujeres se inspiran en algunos modelos clásicos de zapatos para hombre, combinando elegancia, comodidad, diseño y funcionalidad. Estas botas, en una gran mayoría de ocasiones siguen reflejando, en cierto modo, cuál es el origen del diseño concreto. Hay toda una herencia cultural e histórica en muchas de estas botas. Un buen ejemplo pueden ser las botas de motorista, que las mujeres llevan ahora con elegancia y sofisticación.

En este texto hemos querido reunir tres de estos ejemplos de calzado masculino que el tiempo ha reconvertido en una prenda fundamental en el armario de cualquier mujer de hoy en día.

Botas legendarias con una suela de goma flexible y elástica con inserciones en los laterales a las que no fue complicado dar una vuelta para adaptarlas a la mujer. Un calzado que fue asimilado por la moda femenina hace ya mucho tiempo, tal y como refleja el eslogan publicitario de la propia marca hacia la segunda mitad del siglo XIX, que decía: “La Reina Victoria camina en unas Botas Chelsea a diario, lo que demuestra el valor de este calzado”. Hoy en día, las Botas Chelsea son un calzado absolutamente unisex con modelos de calidad y diseño tanto para el hombre como para la mujer.

Un gran ejemplo de como una bota que era absolutamente masculina hace unas décadas, ha pasado a convertirse en un ‘must’ para el armario de cualquier mujer con un cierto interés en la moda. De los campos y montañas a la calle de la mano de grandes mujeres de la industria de la moda y del cine que han elegido estas botas como un complemento perfecto para cualquier ‘outfit’. Este tipo de bota conjunta muy bien con prendas como faldas de diferentes longitudes, vestidos ligeros y jerséis voluminosos. Un toque salvaje para una mujer contemporánea.

Este tipo de botas se caracteriza por estar cubiertas de tiras de cuero con hebillas gruesas y son herencia directa de los moteros, que las usaban hace ya décadas para recorrer kilómetros y kilómetros de carretera. El diseño, desde entonces, ha cambiado poco, pero lo que sí ha cambiado radicalmente es su contexto. De moteros rudos y barbudos a mujeres sofisticadas que las combinan con ‘looks’ femeninos y actuales. El tacón bajo y rugoso hace que las botas de motorista sean muy cómodas para andar por la ciudad, además de que protegen muy bien del frío y la humedad.